Explosión de sabores

“No bebo café para despertarme, me despierto para tomar café”

Tomar café es un viaje al paraíso. Como leí por ahí, un buen día empieza con una taza de café y termina con una copa de vino, otro de mis delirios. Y es que aunque me digan intensa, disfruto ese encuentro entre la taza de café y mi persona, es un momento especial que valoro día a día. Tanto así que deseo amanezca rápido, para que mi paladar pueda sentir ese placer del primer sorbo de café en ayunas.

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Para mi, la felicidad son momentos, acontecimientos o detalles que llenan el alma de magia. La sonrisa de un niño, tu rosa favorita, oler un rico aroma, la frase de un libro que llega en el momento justo, una palabra, una persona, una película, escuchar música, observar un cuadro, pintar, subir la montaña, respirar aire puro, compartir con tus seres queridos y por supuesto una taza de café, una copa de vino. Es atractivo saborear esos instantes y son regalos del universo que debemos agradecer, por más cotidianos que parezcan. Nos conviene prestarles atención y abrirle los ojos a la felicidad.

“La pasión sabe a vino, el amor a café”

Seguramente para algunos la felicidad es otra cosa, cada quien tiene derecho a llevar la vida a su manera. Los criterios generalmente son distintos y eso es genial, porque como siempre digo ¡qué aburrido sería si todos fuéramos iguales! De la discrepancia nacen las mejores soluciones, ya que todos exponen sus puntos de vista hasta llegar a un acuerdo.

Cada quien tiene su forma, cada quien elige cómo vivir según sus creencias, miedos, experiencias. Lo “correcto” para ti es una cosa y para mi otra ¿está mal? Para ti “mal” es una cosa y para mi otra ¿entonces? Evito juzgarte, te acepto y te respeto. La felicidad es algo que se ha discutido desde el comienzo de nuestra existencia, para ti ¿qué es la felicidad? Seguramente tendrás varias respuestas, al igual que cualquier humano. Y es que ¿para qué discutir el significado de este término? Simplemente ¡vívela! Cuando percibas su esencia déjate seducir y experiméntala, al igual que la tristeza, la soledad, etc. Por cierto, ¿existe la soledad? Si te tienes a ti mismo no lo creo, pero ¿te tienes? Esa sí es una gran interrogante.

“Como agua para chocolate”

El hecho es que cuando descubres tus capacidades, cuando decides afrontar tus miedos, cuando defines qué es lo que quieres, todo fluye, aunque suene trillado el río seguirá su curso, encontrará su cauce y el universo te ayudará a construir tu vida hacia la dirección que deseas.

5:00 am

Me desvié un poco del tema, porque quería hablar de la felicidad que me produce tomar café pero, cuando se tiene en la mano una taza o una copa las ideas nacen solas, el aroma le da la bienvenida a la inspiración y el sabor le cede el puesto a la imaginación.

En fin, “no sé cual sea la receta de la felicidad pero de que lleva café, lleva café.”

Adriana Samaniego.